¿Cuántas veces al mes lavas tu casco?

Los ciclistas siempre andan impecables, con la badana y el jersey limpios, la bicicleta lavada y reluciente, las zapatillas sin una partícula de polvo, pero el gran olvidado siempre es el casco, pregúntate ¿Cuándo fue la última vez que lo lavaste? Y te darás cuenta lo descuidado que tienes tu casco.

Hacer un lavado periódico del casco es muy necesario para mantenerlo siempre limpio y en buenas condiciones, tanto por fuera como por dentro y prolongar su vida útil.

Como sabemos la cabeza es una de las partes que más sudor produce y este queda impregnado en las almohadillas y correas de nuestro casco, generando malos olores y la reproducción de bacterias dentro de nuestro casco.

Limpiarlo es muy fácil, en este blog te daremos 3 maneras diferentes para que limpies tu casco.

La primera forma es limpiarlo con pañitos húmedos, no es una limpieza muy profunda, pero ayuda a quitar la suciedad que tenga el casco en el exterior. También los puedes usar para limpiar un poco las almohadillas y correas que estén mojadas por el sudor.

El segundo método es una limpieza un poco más profunda que la anterior y para esto necesitas agua y jabón neutro o con un ph muy bajo para que este no deteriore las fibras antitranspirantes de las almohadillas. Recuerda que es muy importante frotar suavemente con las manos y evitar utilizar un cepillo con cerdas muy rígidas, ya que esto dañará todas las costuras y telas de las almohadillas y puede rayar la pintura del casco. Juagar el casco con abundante agua tibia y secar con una toalla. Otra recomendación es no poner el casco en una secadora o en una superficie caliente.

La tercera forma consiste en remover todas las partes que se puedan quitar del casco; tanto plásticos como espumas y lavarlas profundamente por aparte, y el casco también por aparte lavarlo muy bien con una esponja suave y con un jabón neutro, remover el jabón con agua tibia y dejar secar al aire libre, sin que le dé el sol directo.